miércoles, 13 de marzo de 2013

TOTAL RECALL


Douglas Quaid vive en "La Colonia", un poblado marginal habitado por lo peor del planeta. Trabaja en una factoría, y su rutina es aburrida. Por eso acude a Rekall, una clínica donde te injertan recuerdos para hacer tu vida ficticiamente memorable. Pero algo va mal, y de repente pasa a ser perseguido por las fuerzas del orden de "La República Británica", y se destapará ante él una nueva identidad......¿o es la antigua?......
Una de las películas más odiadas del año pasado, ya que todos guardamos un gran recuerdo del Desafio Total de Paul Verhoeven, protagonizado por el tio Arnie, una película con mucho más carisma que ésta nueva del 2012. Intentaré hacer una crítica algo objetiva, aunque será tarea difícil:
La película del 2011 viene a ser otro film de acción con tintes futuristas. Si hubiera estado protagonizada por Will Smith o dirigida por Michael Bay no nos hubiera extrañado tanto. La calidad de los efectos digitales es altísima y la recreación de los centros habitados hasta se pueden palpar. Incluso la ambientación de La Tierra futura, separada por dos civilizaciones opuestas en los polos y unidas entre sí por un gran túnel es incluso más veraz que no la que presentaban en los 90 con la civilización en el planeta Marte. ¿Entonces, dónde está el problema de la película?

Pues en dos de los principales pilares donde se sustentan la mayoría de buenas películas: el guión y los personajes. Aunque copie la misma idea del original (ambas estan basadas en una novela de Phillip K. Dick) el nivel de los diálogos, las situaciones y sobretodo de algún guiño cómico es alarmantemente bajo. Y en consecuencia, es en los interludios entre escenas de acción donde la película da un bajón considerable. Y a nivel del reparto, yo no me creo a Colin Farrell como actor de este tipo de género (creo que no es su mejor registro). Tampoco está bien escudado, ni la Beckinsale ni Jessica Biel se salen de la pantalla. Y si ya entramos en materia con los secundarios, se hecha muchísimo en falta a los mutantes de la peli original, porque aunque hayan colado a la prostituta tri-pechos, siempre nos faltará Kuato, o el taxista, o incluso a la vidente y su hija.
En definitiva, la peli no está mal en cuanto a cine palomitero en familia un sábado tarde-noche, pero considerarla un remake de la pelicula de los 90 es una total herejía. Aquellos que  pudimos disfrutar de la original en cine, o incluso en algun pase televisivo, echaremos de menos su ritmo trepidante, la cara de Arnie cuando se le rompe la escafandra, o ese líder de la resistencia con ciertos toques al expresident Pujol.


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