Tremenda tragedia la que cuenta Dennis Villeneuve en esta película casi redonda, de una narrativa perfecta, donde no filma todo lo que pasa porque no es necesario. Se centra exactamente en lo que nos concierne lejos de situarse a favor de unos o de otros. Nada es gratuito, si lo vemos es porque tiene un significado. El agua como contrapunto al fuego, como símbolo del líquido amniótico donde nadan los gemelos. La canción para sentirse libre, el túnel para que luego al salir los paisajes sean asombrosos. Toda una lección de gramática cinematográfica.
La narrativa es genial, creando dos lineas temporales (la actual y la de hace 30 años de su madre) separadas por simples detalles. Separada en capítulos en consecuencia de lo que se cuenta en esos fragmentos, y rodada con una dureza especial, pero como he dicho antes, nada gratuita. Consigue en esa mezcla de amor y odio, de desilusión y la búsqueda de los origenes que poco nos importe el envoltorio, si es en Líbano o en América, lo realmente importante es el contenido emotivo. Ademas es escueta en cuanto al sonido, la música es breve pero de calidad, en forma de nana en momentos más trágicos, tocada por Radiohead en los momentos más duros, creando un clima perfecto que no distrae del apartado visual.
Sin duda Incendies es todo un conjunto de sentimientos que te atrapan en el visionado, obligado en VOSE (el doblaje es muy pobre para una película donde se llegan a hablar cuatro idiomas: francés, inglés, líbanes y un extraño dialecto de la zona). Una tragedia al más puro estilo griego que, aunque el desenlace sea su punto más debil, seguro que os atrapará y desgarrará. Porque como dicen en la película: "una chispa fácilemente se puede convertir en incendio".....
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