La película nos lleva de nuevo al conflicto irlandés de principios de los 70's, en su vertiente más trágica y belicista. Cuidado que no es puro cine bélico, más bien un thriller dramático envuelto en un conflicto belicista. Dice el director que se inspiró en películas como The Warriors (Walter Hill), pero a mí me cuesta reconocerlo tras verla.
Gary Hook (Jack O'Conell) un novato militar de las tropas británicas, es destinado a Belfast como refuerzo ante la situación de emergencia que vive la zona, con el conflicto entre católicos y protestantes en su versión más sanguinaria, con ataques terroristas y disturbios masivos. Durante una operación de control en zona enemiga, Gary se ve envuelto en un disturbio que le obliga a separarse del pelotón, quedando aislado en "zona enemiga", donde tendrá que sobrevivir mientras espera que le rescaten...
Que vaya por delante que la película no es un tostón como algunos dicen, ni es tan amable con el lado protestante británico como otros afirman. Lógicamente el director intenta colocarse en un lugar equidistante, aunque por desgracia unos y otros tienen modos muy diferentes de defender su verdad: unos a golpe de bombas y otros a golpe de corruptelas institucionales. Ambos lados, afortunadamente, quedan reflejados exitosamente en el film. La ambientación conseguida es realmente notable, tanto fotografía como "decorados" nos trasladan exitosamente a uno de los puntos más calientes del conflicto, y Jack O'Conell nos sigue demostrando el porqué de su emerger. El actor, visto en otros papeles más al límite, como en Eden Lake, Starred Up o la más reciente Invencible, nos muestra su lado más frágil y "humano", envuelto en un conflicto que no comprende defendiendo unos colores por el bien de conseguir algo de estabilidad social y económica.
Pero desgraciadamente, '71 no se puede librar de un cierto tufillo a telemovie. Lejos de conseguir la épica de otro cine de este tipo, como podría ser Black Hawk Derribado o Tras La Linea Enemiga, mucho más épico, el director quiere enfocarlo desde el drama social. Y si bien es cierto que sale airoso, la lejanía de un conflicto del que conocemos pocos detalles hace que perdamos cierto interés. Otro punto que le hace perder algo de puntuación es el final predecible, con la moraleja final del "todos son malos" y el chico es el bueno. Tampoco quizás es para tanto, aunque realmente el que sale peor parado siempre sea el lado más violento, como pasaba en los westerns con los indios. Quizás habría que preguntarse (y ésto a la película también se le olvida), el por qué de esa situación, ser un poco más críticos con las manos que nos dan de comer. Ni unos son tan salvajes y malos, ni otros son tan buenos (aunque en la peli no lo parezca)
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