Una correcta adaptación de clásicos como Hallowen (ambientación) y las películas de fantasmas de siempre, de los que no corren como condenados. Una chica que tras un polvo en su última cita verá como su vida da un giro, que intentará cambiar con ayuda de sus amigos de toda la vida. Es la típica película adolescente, en la que no se explica casi nada, pero muy efectiva en cuanto al nivel de tensión y ambientación. No hay grandes sustos, sino que todo tiene más bien el toque del thriller, los fantasmas caminan lentos pero constantes, y eso ayuda a ese ritmo. La película está bien, aunque en realidad esperaba mucho más de ella.
A Kevin Smith le faltaba ésta película y Clerks 3 para retirarse (en sus propias palabras) y la verdad que se le nota. Porque Tusk es una bizarrada simpatiquísima, donde aparecen los diálogos y los gags de siempre, pero cuando pasamos al thriller y a la acción, el muy cabrón ha conseguido rodar secuencias que jamás se le habían visto. Sobretodo porque Tusk es una adaptación de un clásico de siempre (que no desvelaré), una historia increible, y que sobretodo no hay que tomarse en serio (como muy bien refleja el mismo Smith en los títulos de crédito). Una ida de olla genial
Miedo le tenía a esta película después de ver durante la semana de festival inventos sosos, sin ritmo y muy pretenciosos. Y la película danesa carece de todo eso. Es una película de chica/lobo y no lo esconde, ni intenta dar giros extraños, ni nada por el estilo. Lo que sabemos que va a contar, lo cuenta, con un pulso narrativo decente y sus buenas dosis de thriller, y punto. Hay quien la compara con Let the Right on in, quizás por la estética, pero es mucho menos que el éxito noruego vampiresco de hace unos años. Yo tiraria más por compararla con Jagten (La Caza), también danesa, y que nos muestra lo complicado de la vida en los núcleos pequeños de ese país. Si te sales de las reglas, lo llevas claro.
No espereis ninguna sorpresa, no la hay
Otra película que me ha parecido correcta, pero que la vi antes del festival. Una historia que, casualidades de este año, como todas huele un poco a refrito, un poco a un Akira adaptado, y lógicamente inferior. Película de adolescentes informáticos que se ven en problemas cuando le siguen la pista a un hacker que les hace la vida imposible, y que luego gira a un tono totalmente diferente (otra de las señas de identidad de casi todas las películas vistas en Sitges). Correcta, siempre que no le exijas demasiado. Podeis leer la reseña que hice en su dia aquí
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