He aquí la clara demostración de que con un bajo presupuesto pero con mucho talento se pueden hacer películas más que decentes. Porque The Innkeepers no es una obra maestra del género de terror, pero es que tampoco lo pretende. Es una película que se deja ver muy bien, con un reparto de no más de 6 actores en una única localización, pero con un buen saber hacer tanto en los movimientos de cámara como en el montaje y la banda sonora. De ahí que tras esta película y su anterior The House of the Devil (que todavia tengo pendiente de ver) Ti West se haya convertido en uno de los directores más esperados en esta edición de Sitges 2013. Luke y Claire son dos jóvenes sin mucha ambición en la vida que
trabajan como recepcionistas en The Yankee Pedlar, un hotel que cerrará
sus puertas dentro de pocas semanas. Pero Claire, antes de marcharse,
necesita aclarar el extaño caso de la Viuda Madeleine, un fantasma que
se pasea por el hotel desde hace más de cuarenta años......
Pequeños trazos de maestría que quedan patentes desde un principio en la colocación de la cámara. Se nota que los planos estan trabajados, como si el Kubrick de El Resplandor estuviera allí plantado. Movimientos pausados de cámara cuando enfilamos los pasillos, acompañados por una música que hace que te ponga en tensión, puro homenaje al cine de terror ochentero. Pero cuidado, porque Ti West no es de esos directores contemporaneos que de primeras mete toda la carne en el asador: Le cuesta de entrar en harina, de hecho, la peli al principio puede resultar aburrida, y en cierto momento tu paciencia llega a pender de un hilo, pero algo te dice que la cosa no termina ahí.....
.....Y Ti West pisa el acelerador, y empieza el acojone, y te mola porque no se corta un pelo en rodar lo que tenga que rodar, sin medias tintas y sin romanticismos. Es lo que hace a The Inkeepers subir muchos puntos de calidad: que aunque el guión sea más bien flojito, se nota que detrás hay talento, como ya pasara en los ochenta con las primeras películas de Sam Raimi o Peter Jackson.
Lástima de una primera parte lenta y de un guión muchas veces incoherente y bastante flojo. Pero aún con esos fallos, es mucho mejor que cualquier Paranormal Activity o peli por el estilo. Vale la pena verla
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