martes, 11 de febrero de 2014

LAS BRUJAS DE ZUGARRAMURDI

Estamos de enhorabuena (aunque no totalmente) todos aquellos fans del Alex de la Iglesia primigenio, el de Acción Mutante y El Dia de la Bestia. Porque aquél sorprendente director luego desapareció dejando paso a un director que queria jugar a ser serio y trascendente, como en Los Crimenes de Oxford o en La Chispa de la Vida. Desde aquella infravalorada La Comunidad que no se le recordaba película decente, ni siquiera ese atisbo que fue Balada Triste de Trompeta


Jose y Antonio cometen un atraco a una joyeria en pleno centro de Madrid. En plena huida secuestran un taxi y toman la ruta hacia el norte con destino a Francia. Pero antes tendrán que pasar por Zugarramurdi, un pueblo con ascentrales historias sobre akelarres de brujas......
Es por eso que al empezar a ver Las Brujas de Zugarramurdi se te escapa una media sonrisa de satisfacción. Porque la primera mitad es totalmente frenética y además muy bien rodada y planificada, con una persecución muy lograda. Pero no solo eso, porque tambien desborda un humor bastante negro y acertado. Y es que no me quedan más narices que reconocerlo, creo que son los mejores papeles de sus dos protagonistas (y eso que no soy dudoso que les tengo bastante manía). Hugo Silva y Mario Casas hacen una pareja cómica bastante notable, dejando por un rato de lado sus tipicos papeles de guaperas.

Pero es que además, técnicamente está muy bien parida (de hay el éxito en los recientes Goya). La fotografía parece en momentos digna de las películas de Rob Zombie, la música acompaña sin desentonar, y todo los decorados y vestuario resultan de lo más convincente. Pero no le perdono la bajisima calidad de los fx en cuanto a vuelos y criaturas se refiere
Porque una vez entramos en territorio brujeril, aparece el Alex de la Iglesia poseido por el mismisimo diablo, excesivo en cada uno de los fotogramas de la segunda mitad de la película. Se olvida absolutamente del guión, los personajes reaccionan de manera poco justificada y el final es una auténtica locura, poco ayudada por los fx que hacen demasiado inverosimiles todas las situaciones. Justamente es en esta parte donde cobra protagonismo la peor actriz de toda la película y seguramente de todo el cine español, una Carolina Bang que si únicamente trabaja en las peliculas que hace su novio por algo será....

Para colmo, no he llegado a entender un final inesperado que me ha dejado bastante frío, y para rematarlo cuela un epílogo de lo menos explicable de la película, que ni siquiera viene a cuento, y que denota que Alex tiene un serio problema en rematar sus películas.....

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