CONTIENE SPOILERS.
Una vez llegados al final, sólo puedo decir que sin duda True Detective será LA SERIE DEL 2014.
En la entrada anterior os comentaba las virtudes en cuanto a técnica y actuaciones, que siguen manteniendo el nivel en los cuatro capítulos finales. Toda esa parte era muy HBO, un retrato minucioso de los personajes, y acción metida con cuentagotas, pero tampoco importaba, porque estabas interesado en lo que le pasaba a Marty y a Rust, tanto profesional como personalmente.
Pasada la primera mitad, empieza a haber algo de acción (enorme el final del capitulo 1x04) y cuando parece que en el quinto se vaya a acabar, se sacan un as de la manga muy bien justificado. La historia avanza, con problemas personales de Marty y un Rust al que la investigación lo va desenmascarando, hasta llegar a los dos últimos capítulos donde vemos cambios en la narración de la historia. Las dos lineas temporales se unen en un presente, con un Rust investigando por su cuenta el caso y Marty dedicado al sector privado. Se encuentran, hablan, y deciden seguir por su cuenta la investigación, porque parece que está enmarronado algún pez gordo.
La historia pasa a ser una "buddie movie", la típica pelicula de detectives (el bueno y el menos bueno) investigando y desgranando toda la investigación de hace 17 años, intentando encontrar la pista de "monstruo de cara de spaguetti con orejas verdes", como lo bautizó una de las victimas. La trama coge un trasfondo donde la pedofilia y la mística se tocan de la mano. Aquí es cuando los espectadores más imaginativos se suben al carro y empiezan a generar teorías sobre un presunto final, cogiendo fuerza la idea de que uno de los dos compañeros fuera miembro de la secta.
Algo normal si analizamos las pruebas que presentan, fotogramas que se prestan mucho al doble juego. También los responsables de la serie han estado enviando falsas pistas, como cuando la hija de Marty estaba jugando con los muñecos a violaciones, uno de los dibujos que hay en su cocina, o las pistas que le dice uno de los interrogados por Rust. Pero luego tanto director como guionista se lavaron las manos, asegurandonos que la serie iba a tener un final de lo más previsible, que la gente se había puesto un pelín paranoica, como ya lo hicieron antes con Lost o con Fringe. El hecho es que tenian razón, no se sabe más por lo difícil de trazar una linea argumental que inculpara a uno de ellos, o porque de verdad optaron siempre por ese final.
El final es correcto, lo suficientemente correcto para coger nuestras teorias, enrollarlas y meternoslas por algún agujero. Algo también acertado, si tenemos en cuenta que el concepto de la serie es que sus temporadas sean autoconclusivas, como ya hace bien "American Horror History". Que nos muestren como los dos amigos resuelven el caso y sobreviven con mayor o menor fortuna es todo un acierto, como ya pasaba en la saga de Arma Letal. Lógicamente, durante la recuperación vemos a un Rust mucho más reflexivo, más de lo que ya lo era, por lo vivido en el agujero de Carcosa. Algo que temíamos que no nos fueran a contar
Si una historia es buena y concisa, mejor respetar la idea original sin necesidad de diluirla en extensas temporadas de 16 capitulos. Ojo, no quiero decir con ello que no hayan series buenas con temporadas largas (a Breaking Bad me remito), pero no era el caso de True Detective, un caso por resolver por un par de detectives. Podemos estar de acuerdo o no con ese final, nos hubiera gustado más fantástico o no, conocer Carcosa, o el porqué de las figuras que hacia Rust con las latas. Pero todos estaremos de acuerdo en que TRUE DETECTIVE ES UNA SERIE COJONUDA, y sin duda arrasará en los premios Emmy de este año.
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