domingo, 1 de junio de 2014

THE SACRAMENT


The Sacrament es una película inquietante, con una atmosfera muy raruna y más tensa que el tanga de falete.
Disfrazada de documental, todo un acierto para dar más veracidad a los hechos, nos muestra a un colectivo que ha caido en las redes del "Padre", aunque se podría llamar mejor "Gran Hermano", por el control que ejerce sobre sus súbditos, y viven en un campamento en las afueras, siguiendo las creencias religiosas y apoyados económicamente por todos los ahorros que han donado los participantes a la causa.

Un grupo de reporteros es invitado por el jefe de una secta mesiática a pasar unos dias en el campamento donde residen de forma primitiva y bajo las creencias de Dios.
 Basada en la tragedia de Jonestown, considerada la mayor masacre humana estadounidense (más de 900 muertos) por causas no naturales hasta los atentados del 11S

Después de una corta introducción llegamos al campamento, y desde el primer momento notamos que hay algo que va mal, y que parece que los habitantes de "Eden Parrish". La película consta de dos partes, primero la presentación de todos los religiosos a la vez que los reporteros van investigando cuáles fueron sus motivos para "alistarse" en el movimiento, con excusa de realizar el documental. Luego, la parte más cruda y oscura, un giro en los acontecimientos que te deja bastante mal rollo y mucho que pensar. Porque no es una peli de terror al uso, con criaturas o espiritus. Ti West recurre al terror de lo cotidiano , a una forma de miedo muy palpable y accesible, donde las autoridades hacen poco en luchar contra ellas.

Es algo ya típico en la estructura de las películas de Ti West, un principio pausado aunque bienintencionado, para luego pisar el acelerador en la media hora final. Un tanto arriesgado, ya que entonces deja la clave del éxito a su buen hacer en la primera hora de película, que es donde alguno espectadores les cuesta entrar, como ya le pasó en The Inkeepers o House of the Devil. Pero sin duda es su película más redonda en cuanto a efectivismo.
Si os gusta la idea, o os gustó la película, recomendaros también Red State, de Kevin Smith, otra película que utiliza parecidos protagonistas, pero que tiene mucho mejor ritmo gracias a una filmación normal, y a unos protagonistas mucho más experimentados, con Michael Sparks que lo borda como cabeza visible de la secta.



0 comentarios:

Publicar un comentario