sábado, 16 de mayo de 2015

MAD MAX: FURY ROAD

Y por fin llegó el momento, tras una semana aguantando el tremendo hype que nos llegaba desde el otro lado del oceano, puntuaciones que no bajaban del 8, y tras el pase de prensa nacional, toda la crítica aplaudiendo la nueva película de la saga, dirigida por el mismo George Miller que tuvo a bien, hace más de 30 años, de mostrarnos el descenso a los infiernos de Max Rockatansky. Por fin llegó el momento de deleitarnos, nuevamente, con las aventuras del antihéroe australiano.

Tras una larga travesia por el desierto Max es capturado por la tribu de Inmortal Joe. Al mismo tiempo, el camión de guerra de la tribu, conducido por Imperator Furiosa, sale en busca de combustible a La Ciudad de la Gasolina. Lo que no se esperan, es que Furiosa se desvíe de su camino, para buscar un lugar mejor donde vivir. Al darse cuenta, Inmortal Joe monta un equipo de persecución, en el que el azar ha determinado que también esté Max..
.
Después de los créditos finales uno sólo puede llegar a pensar: VAYA PEDAZO DE BURRADA!!. Pero ojo, no me malinterpreteis, todo en el buen sentido de la palabra. Porque George Miller ha hecho lo que muchos esperaban: quedarse con lo más recordado de la trilogía anterior, es decir, las persecuciones de coches, y alargarla durante casi dos horas de frenesí brutal. Obviamente, el paso de treinta años y un mejor presupuesto se nota muchísimo. Una fotografía mejor cuidada y un trabajo artístico brutal, tanto a nivel de personajes como el excelente diseño de los vehículos.

Pero sin duda, lo mejor de todo, es que al verla no tenemos esa sensación de que la película se ha corrompido, ya que el estilo visual de George Miller sigue imperando en la película igual que hacía en la trilogía anterior. Los trucos de cámara, esos frenazos bruscos, el detalle al manejo de los mandos, palancas, pedales y botones, el tremendo vértigo que te da en algunas escenas repitiendo los cenitales, las peleas y un largo etcétera de recursos, como un par de interludios donde la cosa se calma y los diálogos cogen fuerza, para dar un par de giros a la trama, necesarios para que el ritmo no decaiga.

Curiosamente, lo peor de la película sea el propio Mad Max. Tom Hardy es eclipsado de manera apabullante por una Charlize Theron enorme en su papel de Imperator Furiosa. De hecho, si la película se hubiera llamado Imperator Furiosa en lugar de Mad Max, no nos hubiera extrañado nada. El antihéroe australiano sólo sirve como nexo de unión entre la trilogía anterior y la nueva era, más allá de un par de guiños que hace Miller al pasado (la caja de música, por ejemplo), y es a partir de la media hora donde Furiosa coge las riendas y se hace la ama de toda la película. Así sin más, Max se ve relegado a un par de chascarrillos, unas cuantas ostias y tres gruñidos. El resto, mujeres al poder.

Otro detalle que hecho de menos, y donde creo que ahí si que han fallado, es que se han pasado tres pueblos deshumanizando a la sociedad, y es que se advierte en ese detalle un paso del tiempo mucho mayor del que ha pasado Max. En las películas anteriores, las tribus tenian un aspecto más humano y cercano, si bien se mostraba una degeneración en los nacidos en ese ambiente (el niño del bumenang, por ejemplo, que no sabía hablar y mataba sin miedo con su arma arrojadiza). Pero que conste que no me importa el aspecto actual de las tribus, de hecho me encanta, pero un Max más viejuno hubiera aportado algo más de veracidad.

Resumiendo, Mad Max es puro cine palomitero, cargado de adrenalina de alto octanaje que te hará disfrutar como un enano, y que se pasa por el arco del triunfo a otras películas de "acción" que a su lado parecen videojuegos ñoños. Cierto es que cojea en los puntos que antes explicaba, pero total, son detalles que suceden al inicio y al final de la película, unos veinte minutos de metraje. El resto de la película es sublime, con varios momentos para recordar (esa guitarra-lanzallamas) y un mejor inicio para lo que se advierte una quinta película, de la que esperemos también se ponga Miller al volante.

0 comentarios:

Publicar un comentario